Me da coraje no saber el color de tu alma,
Me da porque conozco el aroma,
El sentir, tu tacto, el recorrido
Que harán tus lágrimas al caer…
Y no le veo el color.
Poco importa cuando tanto conozco de ti.
Poco importa la miseria que portes,
Si es que alguna cabe en tu pecho,
Pero me da coraje,
Me da porque no quiero perderme ni un centímetro
Del preciado brillo que tu ser irradia.
¿Eres blanca? ¿Azul o rosa?
¿Amarilla como la estampa de un ocaso?
¿Verde y fresca como la hierba que unge mi frente
cuando el prado me aferra en sus brazos?
¿Eres violeta, corola viva de la flor de mi ventana?
Eres todos los tonos de la alegría,
Cualquier matiz que una amistad verdadera vierte.
Eres también incolora, transparente,
A través de ti veo todo tal como debo verlo,
Con la nitidez que da la mano siempre tendida,
Con el arrojo que se siente
Cuando te sabes besada constantemente
Entre pinturas, luces,
Y palabras escritas desde el aliento.
Tantos años, tantos tonos, tantos matices, tantas luces...
ResponderEliminartanta vida,tanta unión, tantos encuentros....tantas palabras..y tantos hechos.
ResponderEliminarTANTA AMISTAD......
Roxy, qué de cosas, guapa. TKM.
ResponderEliminarBuenas noches guapa
ResponderEliminarsolo te saludo
besicos y sigue asi
Alfredo, que alegría, espero que te encuentres un poco mejor.
ResponderEliminarMuchos besicos.
¡Nooooooo! Seguro que en el afán por saber hasta lo profundo del 'color' de las cosas, perdemos definitivamente su esencia, que se nos va de las manos. Fuera de control...
ResponderEliminarSiempre meros advertidores- espectadores.
Muy bueno tu comentario al 'encendido-apagado'. Gracias, Merche.
Gracias Pilar, un placer leerte, comentarte y verte por mi granero. Nos vemos.
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