viernes, 17 de julio de 2015

Entre sábanas y crepúsculos



Me estalla en la frontera límbica
la pasión de tus ojos negros.
El pericardio, loco,
incendiado como yesca irracional
va aturdiendo mi raída cognición.
Y tus manos, insistiendo en arrancarme
los restos de un soterrado candor,
arrojan lujurias sin nombre
hasta mi vientre pagano.
Columpio, sobre tu aliento de hombre dulce,
mis venas más osadas
que, instintivas, fluctúan libres.
Y mientras hoy conquisto tu noche,
mi savia exaltada se torna susurro
rendida a tu narcótico tacto.
Sin remedio, voy cayendo invertebrada,
medusa cristalina,
en un lascivo estado de liquidez,
presa de tus labios húmedos,
de la curva violenta de tu espalda,
de este nirvana carnal
emplazado entre sábanas y crepúsculos.
M/M


7 comentarios:

  1. Una delicia estos viajes tuyos por el interior y el acompañamiento del saxo, genial. Mi instrumento favorito que eleva las emociones y sentimientos del poema.


    Te engañé,
    muté mis ojos tristes
    por esos faros negros
    que encienden tu corazón.
    Sin ser yo, era yo,
    mi cuerpo fue tuyo,
    un alma rendida
    que en suave cadencia
    se abandonó
    a tu éxtasis total.
    Fui yo, siempre seré yo,
    ese mar calmoso
    que baña tu cuerpo
    en un lecho de pasión.

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  2. Sau, los ojos negros siempre nos alcanzan en su profundidad!

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  3. Fernando, para cuando tu propio blog?? Es preciosa!

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  4. Animo Merche, me encanta la poesía y la prosa poética

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Las puertas de mi granero siempre abiertas para vosotros