martes, 18 de febrero de 2014

Cambiar el rumbo



En un asterisco de providencia
se engloba el metal de tu sed.
Vas caminando sepultando risas
y flores,
y encendidos pechos que por ti suspiraron.
Quisiste cambiar el rumbo
y te abandonaste
en el fluir de un río manso.
Quisiste cambiar el rumbo
y un cianótico y desoxigenado velo de estragos
se apoderó de tu estirpe dormida.
Ya solo el hado
con su mágico báculo
puede trocar tu hierro
 por dulce aliento de plata,
por agua de vida plena.


9 comentarios:

  1. Sugerentes y expresivos versos cargados de imágenes bellas.
    Un beso.

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  2. Bueno, eso en cierto modo es un dejo de esperanza, ese último hálito o rescoldo contra lo obvio...
    Me encanta, por cierto, Bryan Adams y esta canción, Heaven, es una delicia.
    Besos.

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  3. Siempre hay tiempo para cambiar de rumbo. El quid de la cuestión es que el barco responda...
    Un abrazo, Merche, y bienvenida de nuevo al cenáculo de los poetas.

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  4. Precioso Merche!
    Los cambios siempre implican riesgos, lo que importa es no perder la esperanza.
    Un fuerte abrazo.

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  5. Muy de tarde en tarde ... pero siempre vengo a un granero que es como mi patria!!
    Gracias a todos por visitarme.

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  6. Merche, hace tiempo que no sé nada de ti, imagino que te falta tiempo...No obstante vengo a visitarte y a leer tu profundo y entrañable poema...En ese fluir manso de la vida está el cambio, el hado con su mágico báculo, que va dando lugar a la evolución, a la transformación continua...Bella y sugerente música nos dejas, amiga...
    Mi gratitud y mi abrazo inmenso por tu amor a las letras...
    Mi ánimo siempre, poeta y amiga.
    M.Jesús

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  7. Veo que la espera ha merecido al pena. Tu grácil pluma nos asombra como en cada intervención.
    Me gustaría ser un hado y guíar con mi báculo el depósito de tus esencias para que en un acto inconsciente tu pluma destilara su continuo e interrumpido caminar para deleite nuestro.

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  8. He llegado tarde a este hermoso blog. Me encanta tu poesía.

    "Ya solo el hado
    con su mágico báculo
    puede trocar tu hierro
    por dulce aliento de plata,
    por agua de vida plena."

    Bello final con esperanza. Abrazos desde la lejanía!

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Las puertas de mi granero siempre abiertas para vosotros