A ratos,
suelto mi pantera negra
para que cubra con sus dientes
tu reto.
Y me pierdo en ella,
me dejo engullir
por el salvaje crepitar de las llamas de sus ojos.
Y ya
soy la seductora que derrama,
en el revés del alma,
toda la linfa del oro exprimido
toda la carne de un íntimo crepúsculo.
No hay forma de atarme…
…de atarla.
La libertad la absorbe
y tu vientre se le hace pequeño,
demasiado pequeño
para su colosal anhelo de felina sin límites.
A ratos,
suelto mi pantera negra
y me permito ser yo.
suelto mi pantera negra
para que cubra con sus dientes
tu reto.
Y me pierdo en ella,
me dejo engullir
por el salvaje crepitar de las llamas de sus ojos.
Y ya
soy la seductora que derrama,
en el revés del alma,
toda la linfa del oro exprimido
toda la carne de un íntimo crepúsculo.
No hay forma de atarme…
…de atarla.
La libertad la absorbe
y tu vientre se le hace pequeño,
demasiado pequeño
para su colosal anhelo de felina sin límites.
A ratos,
suelto mi pantera negra
y me permito ser yo.